Plantas para luz


A menos que estés cultivando una buganvilla, un cactus, un rosal o un seto, la mayoría de las plantas ornamentales disfrutan del sol medio, o mar del sol parcial. Aunque muchas plantas dicen en su etiqueta que necesitan pleno sol, en mis años de experiencia he visto muchas de estas plantas crecer hasta más saludables cuando reciben sol directo solo en las mañanas o en la tarde. A veces un poco menos, es más. 

Algunas de las favoritas para este tipo de luz son los jengibres, las mandevillas, los crotos, la ajuga, las vincas, las impacientes, el arce japonés, los ficus y las begonias. También las palmeras areca, la majestad y la livistona. 

Plantas de luz filtrada

Cuando pienses en luz filtrada, piensa en la que entra a través de los árboles en un bosque denso. Es luz a veces intensa pero cuando llega a la superficie de las plantas es suave y no quema al tacto. Un ejemplo clásico de plantas que disfrutan de la luz filtrada son las orquídeas. También las hortensias, las begonias, el coleus, muchos tipos de helecho, la ajuga, la primarosa, las azaleas y la amatista.  Como decimos, las plantas utilizan la luz solar para elaborar la energía que necesitan, máxime cuando se trata de plantas y flores que requieren más luz, ya que su fisonomía no está preparada para sobrevivir en zonas oscuras. En estos casos suele traducirse en un menor desarrollo. No crecen o lo hacen lentamente Crecen inclinadas por su búsqueda del sol.Los tallos se vuelven más finos La distancia entre los nudos se alarga (ahilamiento).Las hojas adquieren una coloración amarillenta.No tienen capullos florales, y si los tienen, se caen o no se abren. En consecuencia, no fructifican.